sábado, 9 de enero de 2010

LUNES 4

Llegamos con el barco a Dakar sobre las 7 y comenzamos a desembarcar, una vez recopiladas todas las maletas, las dejamos allí y nos vamos a desayunar a un sitio cercano, porque hasta las 10 no sale la chalupa para ir a la isla de Goree. El desayuno buenísimo, pero... nanca nanca... tardan más de media hora en servirnos! Casi perdemos el barco, qué estrés!


En Goree nos alojamos en una casa colonial muy bonita cercana a la playa. Es una casa antigua con habitaciones enormes, nos repartimos entre 4 habitaciones, y comenzamos la visita a la isla.


Topi se las ha apañado para conseguir entrar hoy a la casa de los esclavos que está cerrada los lunes, así que mejor. Empezamos la visita por ahí, sobrecoge estar en los cuartos donde se hacinaban miles de personas que capturaban para esclavizarlos y enviarlos a América...


Luego seguimos paseando por la isla, gran baobab, taller de cuadros de arena, paseo por la zona del castillo... y descenso de nuevo para comer en un hotel cercano a la playa. Comemos en una terraza semicerrada pero donde las moscas nos invaden... eso no nos gusta mucho pero bueno al menos van rápidos sirviendo y pronto nos vamos de allí. Topi se va ya en la chalupa de las 12 a ver a su familia y mañana vendrá de nuevo para recogernos.


Nosotros aprovechamos para hacer nuestras compras, que aunque parezca increíble aún no habíamos gastado casi ningún cefa, y Sara ya tenía una ansiedad... jajaja. Vamos primero a unas “boutiques” subiendo al castillo de lo más pintorescas, y allí compramos de todo: figuras de madera, cosas de mimbre, de hojalata, telas.... nos echamos unas risas con las mujeres de los puestos que te lían la cabeza en los regateos, nos lo pasamos en grande. Luego continuamos por una calle en la que exponen cuadros pintados en lienzo muy vistosos y también nos toca negociar, ya estamos hechas unas expertas, porque conseguimos precios a nuestro parecer muy buenos (ellos seguro que hacen negocio con nosotras pero bueno todos contentos). Para rematar la tarde se nos ocurre entrar en el “village” artesanal y allí nos clavan, unos cuadros de cristal preciosos, pero... clavada! Jeje, pero oye que nos quiten lo bailao.

No hay comentarios:

Publicar un comentario